Noticias

Facturación Electrónica y Medio Ambiente

on 29 julio, 2015

En el siglo II adc., bajo la administración del eunuco Cai Lun, consejero imperial chino, se perfeccionó y normalizó la técnica de fabricación del papel. Fue un invento admirable, ligero, flexible y cómodo de portar y utilizar, que pasó luego a Japón, a los árabes y, de ellos, a Europa. El papel, aliado a la imprenta, trajo consigo una revolución cultural que cambió el mundo y, hasta hoy, asociado con el desarrollo económico y social, ha sido imprescindible. El papel procede de la pulpa de celulosa que se extrae de la pasta de madera de árboles, principalmente pinos y eucaliptos; para fabricar 1 kilo de papel convencional, son necesarios 100 litros de agua… y, para un paquete de 500 folios, casi 200 litros de agua y 26,8 kWh; 17 árboles se utilizan por cada tonelada de papel, además de resinas ácidas tóxicas y otras sustancias de blanqueado, que resultan muy contaminantes para nuestro Medio Ambiente.

En nuestro mundo, cada día más digital, con un Medio Ambiente en peligro ya clarísimo, y en plena crisis, no podemos ignorar estos datos; en nuestras empresas hace muchos años que no utilizamos papel para mensajes y comunicaciones, que efectuamos vía email. Todos los analistas están de acuerdo: no pasará mucho más tiempo antes de que la factura electrónica sea tan habitual como la factura en papel, para terminar por superarla.

Y el antiguo invento del papel se reservará seguramente para usos más románticos, en los cuales la eficiencia se mida por otros parámetros…

Share this post:
puntualFacturación Electrónica y Medio Ambiente